Si a cuenta gotas das amor, no pidas aguacero que te cubra en la sequía. Hay cosas que se dan, porque se dan. El amor no se da apresurado ni con medidas. El solo explota. Pone de cabeza todas las cosas mientras nos deshoja margaritas de lógica. Revienta fuegos pirotécnicos donde le place y si provoca algún incendio no planificado, el solo se sienta a ver el fuego sonriendo. Así que no me preguntés. Juntemos los cuerpos y veamos a ROMA arder.
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